ARENEROS, PROMOCIÓN DEL AÑO 1961: HOMENAJE A LUIS ESTER BUTRAGUEÑO

El día 10 de mayo de 2019 falleció nuestro compañero, tan querido, Luis Ester Butragueño, descanse en Paz.

Y, porque a lo largo de los últimos años, en las comidas que, cada segundo jueves de mes, celebramos los miembros de la promoción del año 1961 del Colegio de Areneros, Luis ha participado activamente, contribuyendo con sus escritos, en prosa y en verso, al éxito de las muchas sobremesas que hemos compartido, el custodio del blog de la promoción ha reunido y publica en esta entrada, a modo de homenaje, testimonios del afecto hacia nuestro compañero y algunos de los textos, ya publicados en el blog, del propio Luis.

El esquema del contenido de esta entrada es el siguiente:

1. Textos, en prosa y en verso de Luis Ester Butragueo

2. Textos de condolencia en el WhatsApp

3. Esquela de Luis

4. Fotografías de Luis en comidas de la promoción

1. TEXTOS, EN PROSA Y VERSO DE LUIS ESTER BUTRAGUEÑO

EN RECUERDO DE PABLO SATRÚSTEGUI. PABLO Y EL MILAGRO DE ARENEROS

Pablo Satrústegui no era amigo mío. No nos habíamos visto desde el Colegio hasta las comidas de los jueves. Muchísimos años. Y en el Colegio no coincidimos casi nunca en la misma clase, no teníamos los mismos amigos ni la misma pandilla, no íbamos a los mismos guateques, en fin, no éramos amigos.

A pesar de ello, Areneros nos debió dejar unos lazos y unas ataduras invisibles de las que no éramos muy conscientes, que en cuanto han tenido ocasión de hacerse notar, lo han hecho y bien. Por ejemplo, en nuestras comidas de los jueves, estos lazos han servido para recuperar el tesoro de las viejas amistades que se habían perdido, y también han obrado el pequeño milagro de que muchos de nosotros, que no habíamos sido amigos nunca, el sólo contacto de los jueves con los lazos que Areneros nos había dejado, ha hecho surgir amistades nuevas, fuertes y profundas. Esto creo que me ha sucedido a mí, con Pablo y con todos los conmilitones.

Y es que Pablo era especial. No tener piernas, y no darle importancia era un ejemplo. Nunca nadie le oyó quejarse. Parece como si quisiera decir a todo el mundo que Dios le había dado tantas cosas buenas, su familia sobre todo, que no tenía derecho a quejarse por algo tan sin importancia como unas simples piernas. Yo esto lo he contado en muchos sitios y a mucha gente, y todo el que lo escucha se queda admirado y sobrecogido.

A su mujer Mercedes sólo la vi el día que fuimos a su querido campo de La Huerta de Piedra, (cómo lo pasó Pablo), y el día del funeral. Ese día con mucho esfuerzo, por el gentío que asistió, conseguí llegar a saludarla, y a pesar del enorme follón que había, me escuchó con atención. No recuerdo lo que le dije, sólo que me presenté como uno de los de Areneros de los jueves. Me dio las gracias por lo que Pablo disfrutaba con esas comidas, y me transmitió una paz y una serenidad, que me hizo salir de allí muy reconfortado. Mercedes, es probable que no te vuelva a ver, ya sabes, no tenemos los mismos amigos, no vamos a los mismos guateques… Pero por si alguna vez leyeras esto, quiero que sepas el gran bien que me trasmitiste, y que en vez de reconfortarte yo a ti, fuiste tú la que lo hiciste conmigo.

Y gracias a ti Pablo, tú sí que has trasmitido cosas y todas buenas. Has sido un ejemplo para todos, de bondad, de simpatía, de categoría. Y gracias también a Areneros, que obró en mí el pequeño milagro, y ya puedo decir bien alto que Pablo Satrústegui sí que era AMIGO MÍO.

Septiembre de 2013

EL SONETO ESTÁ OBSOLETO

Tú pregúntale a un chaval

qué es soneto, y te dirá,

que es un delantero centro

de la Juve o del Milán,

o un helado de vainilla,

o una canción de Amaral,

que no sé muy bien quién es,

mas me suena cantidad,

o un juego de la Nintendo,

o yo qué sé, qué más da.

Todo menos un poema

que es lo que es en realidad.

En fin queridos colegas,

a rimar en libertad,

que el soneto está obsoleto,

y la mente ha de volar

por el intrincado espacio

de la inspiración no más.

Esto sólo es un romance,

que es muy fácil de rimar,

más si me pongo cachondo,

soy capaz de encadenar

cuartetas y piés quebrados,

redondillas sin igual,

y una décima espinela,

que no sabéis de qué va,

pues no tenéis puta idea

de estrofas versificar.

He dicho

Noviembre de 2015

A RICARDO MARTÍN LUCAS

Mi querido Ricardito,

Me ha dejado acojonado

Tu facilidad pasmosa

para enjaretar estrofas

de versos encadenados,

sonetos o pies quebrados

Ver tu décima espinela,

vaya tela.

Que fluidez,

que soltura,

temo no estar a tu altura,

pues qué le vamos a hacer.

Yo lo seguiré intentando,

competir con estos vates,

Josemari Mazarrasa

o Ricardo Martín Lucas,

de imaginación escasa,

o rimas más bien caducas

Descansa un poco Ricardo,

o con seudónimo escribe,

y así nadie lo percibe

si es Ricardo o es Eduardo

o Gerardo o San Bernardo,

el que tus versos suscribe

A JOSEMARI MAZARRASA

Josemari Mazarrasa,

¿qué te ha hecho Torquemada?

Yo creo que nada de nada.

Es un simple versolari

mi querido Josemari,

que cuando rima se pasa

De la métrica es esclavo,

y es que es capaz de rimar

como le sale del nabo.

Perdón por la ortografía,

ya sé que nabo es con be,

perfectamente lo sé,

pero me importa un carajo

si por conseguir un verso

he de buscar un atajo.

No te metas más con él,

no seas cruel,

no se nos vaya a enfadar,

deje de versificar,

y deje de hacer sonetos

aunque estén algo obsoletos

He dicho

Madrid, 14 de enero de 2016

QUINTILLAS DE CABO ROTO

Estos versos los dedí

a los vates de este grú,

Jose Mari Mazarrá,

a Carlos Fernández Prí

y a Ricardo Martí Lú.

Son unos buenos chavá

que intentan hacerlo bié,

y con mucha voluntá

se les ha visto el plumé.

No tienen ni puta idé.

Versifica de cojó

Ricardito Martín Lú,

pero te falta emoció,

encanto y fascinació,

tus versos ni fa ni fu.

Olvídate del soné,

los versos de pié quebrá,

y rima con libertá,

y que a pesar de estos vé,

yo te quiero compañé

Jose Mari Mazarrá,

que tampoco lo hace má,

también le falta esa chi

que solamente tené

los que fuimos elegí.

No te enfades José Má

si con tus versos me mé,

no te lo tomes a má,

que yo a ti también te quié

a pesar de los pesá

A Carlos Fernández Prí

no se le puede juzgá,

pues acaba de llegá,

con un soneto aburrí

y además algo vulgá.

Te admiro querido Cá

pero no por esos ve,

y sí porque eres capá

de jugar muy bien al té

partidos individuá

En fin queridos colé,

os lo digo con carí,

aprended de este poé,

que así casi sin queré

os puso bien a parí

He dicho

10 de marzo de 2016

A MI QUERIDO AMIGO RICARDO MARTÍN LUCAS,

AFAMADO RIMADOR DE SONETOS

En mi vida jamás rimé un soneto,

y sospecho no voy a ser capaz,

Hay que intentarlo, hay que ser tenaz,

y por ello me lo tomo como un reto.

El predicado, el verbo y el sujeto,

se manejan de modo pertinaz

y aunque al principio te sientas incapaz,

al final encontrarás un vericueto.

A Ricardo Martín Lucas le dedico

este soneto algo desmañado,

algo soso, así lo califico.

He dicho

11 de junio de 2016

JESÚS GRANELL, IN MEMORIAM

Cuando falleció Jesús, sentí la necesidad de dedicarle de alguna manera un recuerdo. No me atrevía a escribir nada, pensando que era muy difícil estar a la altura, a la gran altura de Jesús. Por fin me he decidido, y aquí estoy.

Con Jesús perdí el contacto durante muchos años, contacto que recuperé, como con muchos de los queridos conmilitones, en nuestras comidas de Mirasierra. Aquí recordamos juntos que en el colegio tuvimos una buena amistad, que gracias a Dios se recuperó de nuevo estos años. La amistad es ciega como el amor, y tan es así, que Jesús cada vez que me veía me decía que había sido el mejor jugador de fútbol del colegio, (hay que estar ciego), y en la dedicatoria de su libro me escribió, “a mi amigo Luis Ester, el mejor dribling de todos los tiempos”, (hay que estar más ciego todavía).

Jesús y yo fuimos compañeros de clase todo el bachillerato, y de pupitre o muy próximos, en 6º y en Preu.

En los primeros cursos, Jesús, por la razón que fuera, no brillaba mucho. Allí sacábamos buenas notas, o incluso dignidades, los alumnos que estudiábamos un poco, éramos buenecitos, y no causábamos problemas. En fin, los que éramos un poco capullos.

Otra cosa fueron los últimos cursos. Allí brillaban sólo los que auténticamente valían, y a los “buenecitos” se nos iba relegando poco a poco. Yo pasé de soplarle (poco) a Jesús en los primeros años, a copiarle descaradamente en los últimos. En 6º y en Preu ya se vio que Jesús era un tío muy inteligente, y la progresión que estaba teniendo hacía vislumbrar que podría lograr lo que quisiera. Como así fue, con una carrera brillante, y un ejercicio profesional extraordinariamente brillante también.

No voy a hablar aquí de sus grandísimas cualidades humanas que todos sabíamos. Otros que le conocieron más, lo podrían hacer mucho mejor que yo. Sólo quería comentar algunos viejos recuerdos que me asaltan ahora que nos ha dejado.

Jesús, descansa en paz

15 de octubre de 2016

A RICARDO MARTÍN LUCAS, “IN MEMORIAM”

Se nos murió Ricardo, nuestro amigo

de los conmilitones de Areneros.

Fuiste entrañable y por eso quiero

decirte que tu falta es un castigo.

A la maldita enfermedad maldigo,

que se llevó de los vates al primero.

Te echaremos de menos compañero,

ya no podremos disfrutar contigo.

Ricardo, te dedico otro soneto,

éste más triste, mustio y afligido,

pero siempre con todo mi respeto,

que sabes que te tuve y te he tenido.

Un gran amigo fuiste, fiel, discreto,

que a todos nos tuviste seducidos

Madrid, 11 de noviembre de 2016

QUINTILLAS

Estas quintillas expido

a nuestro amigo Gaspar,

que hasta mí se ha dirigido

y creo que la ha jodido

espero que a su pesar

A Gaspar le ha interesado

la salud de compañeros

a los que yo también quiero,

pero no se ha enterado

de que no me he disgustado

En esta vida se puede

ser corrupto y ser cabrón,

ser un mierda, un maricón,

pero no se puede ser

pesado y conmilitón.

Y tú querido Gaspar

estás algo pesadín,

sin parar de preguntar

cuando se van a curar.

Te pones plasta, jolín

En fin caro compañero,

que tú sabes que te quiero

a pesar de estas quintillas,

que serán la comidilla

del día conmilitonero

Tu amigo Luis Ester

9 de marzo de 2017

RESPUESTA A JOSEMARI MAZARRASA

Me ha gustado ese romance

mi querido Mazarrá,

que no sé si lo has escrito

o te ha llegado por fax,

por correo, mensajero,

o quizá por el whatsapp.

Me ha gustado ese romance

que da mucho que pensar, porque parece de risa,

pero qué coño, ni hablar,

es una cosa muy seria

que nos hace meditar.

Me ha gustado ese romance,

es una barbaridad,

el que a todos nuestros nietos ,

desde tan temprana edad,

se les enseñe esas cosas

sobre la sexualidad.

A un niño le gusta un niño,

otro tiene tres mamás,

otro besa al despedirse

la probeta de cristal.

Hay dos niñas que se aman, otra se quiere operar,

¡qué horror! esto es un desmadre

que no se puede aguantar.

En fin estimado amigo,

mi querido Mazarrá,

sólo falta que nos digas

si escribiste esa maldad

para así felicitarte,

y si no, pues es igual,

el romance es cojonudo, cojonudo de verdad,

y a pesar de ser muy serio,

tiene gracia cantidad.

20 de abril de 2017

PROVOCACIÓN

Mi querido José Mari

soy una lacra social,

me acabo de convencer,

soy una calamidad.

Tu escrito clarividente

me acaba de demostrar

que poseo esos defectos

y alguno más que ahí no está.

Pero me importa un carajo,

me da igual, qué más me da,

ser distinto de los mierdas

de la corrección social.

Menos mal que me acompañan

en el modo de pensar

aquestos conmilitones

a los que quiero a rabiar

por ser gente cojonuda,

cojonuda de verdad.

14 de septiembre de 2017

UNA RESPUESTA A GASPAR

Nuestro conmilitón de 1º clase, Gaspar Bléin, (lo de 1ª clase se lo gana con los licores y pastas caseras con los que nos endulza alguna sobremesa), nos pide sugerencias, aportaciones, etc. al borrador de Estatutos de “La Fundación sin Ánimo de Hurto”, que pretenden regular el funcionamiento de la misma. Ahí va el mío.

Enmienda a la TOTALIDAD

El título de la Fundación es poco afortunado. Quién coño puede aspirar a hurtar nada, donde no hay nada para hurtar. Como las reuniones se realizan una vez al mes, después de una opípara comida, yo le llamaría “Fundación sin Ánimo de Eructo”. También serviría regüeldo, vocablo que gustaba mucho al maestro Cela. Esto es mucho más apropiado para una buena digestión.

Bueno, después de esta chorrada que espero pierda por mayoría absoluta, por el momento no tengo nada más que aportar.

Un abrazo a todos

16 de abril de 2018

2 TEXTOS DE CONDOLENCIA EN EL WHATSAPP DE LA PROMOCIÓN.

J.L. Mingo

Hoy, 10 de mayo de 2019, Don Luis Ester Butragueño, nuestro compañero, ha muerto.

Luis, lo sabemos bien, tras una vida plena, deja tras de si una inmensa estela tejida de buenas obras y mucho amor; por ello, aunque comidos por la tristeza, más allá de llorar y lamentarnos por su marcha, nosotros, sus compañeros de colegio, miramos y admiramos con orgullo cuan hermosos son los frutos de la vida que, desde niño hasta ser anciano, con ladrillos de bondad, argamasa de amor y confianza en Nuestro Señor, ha construido para su familia, sus amigos y para la sociedad toda en la que ha vivido.

Reciban los deudos de Don Luis Ester Butragueño, el afecto de los compañeros que, de niños compartimos con él los pupitres del Colegio de Areneros, y la compañía en su dolor por la subida al Cielo de este hombre, generoso del todo en sus afectos y pródigo siempre en dar y compartir amor.

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A. Camón

¡¡¡Dios lo bendiga!!!

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J.M. Aberasturi

Echaremos de menos su sonrisa sempiterna a la salida de misa. Un abrazo para Elena con nuestra oración y nuestra pena.

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S. Gil Casares

Desde Makassar base histórica de Sandokan, un abrazo muy triste a todos

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L. Espiga

Francamente me siento muy fastidiado con lo de Luis, Aunque esperado es muy doloroso cuando sientes gran cercanía y cariño. Rezaremos por el y por su familia

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P. Noelle

Te vamos a tener siempre presente en nuestro corazón, querido Luis. Eres un buen ejemplo porque siempre te has esforzado por estar con nosotros hasta el cierre de tu vida terrenal. Un grandísimo fuerte abrazo. Descansa, amigo

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C. Boullosa

Desde Tenerife rezare por él. Siempre nos quedara su recuerdo y su compañerismo hasta el final

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E. Gimeno

Acabo de leer la dolorosa noticia. Un abrazo para la familia de Luis. Y otro para todos vosotros que estaréis tan apenados como yo me siento.

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R. Blanch

Descanse en paz, un abrazo para todos sus familiares, amigos y todos los que disfrutaron con su amistad

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P. Oñorbe

Luis has sido un ejemplo de fortaleza para todos nosotros así que un buen trozo tuyo aquí se queda

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Gurri

Esta mañana hemos enterrado a Luis. Su mujer, Elena, me ha encargado que os diera las gracias a todos los que la habéis acompañado con vuestro cariño y apoyo.

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J. Echánove

Estoy en Holanda y siento no poder ir al funeral de Luis. Le he encomendado esta mañana en la misa. Alguno de los que vayáis por favor trasladárselo a su mujer e hijos. Gracias

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J.L. Sánchez Fernández Valderrama

Adiós Luis. Te echaremos mucho de menos

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E. Gimeno

Estoy en el aeropuerto camino de Tenerife. Por favor dar el pésame a su mujer de mi parte.

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D. García - Loygorri

Querido Luis, allá arriba acuérdate de nosotros como nosotros nos acordamos de ti.

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J. Navarro

Para Elena, la de Luisito Ester, mi muy profunda y muy sentida pena, por la pérdida y el sufrimiento de "Luisito". Lo quería de verdad. El colegio, la IPS, la carrera e incluso algún trabajo juntos. Remontando mi fe, acuérdate de nosotros y protégenos. Muchos abrazos Luis.

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J.L. Mingo

EN RECUERDO DE LUIS ESTER BUTRAGUEÑO. LUIS Y EL MILAGRO DE ARENEROS

Luis Ester no era amigo mío. No nos habíamos visto desde el Colegio hasta las comidas de los jueves. Muchísimos años. Y en el Colegio no coincidimos casi nunca en la misma clase, no teníamos los mismos amigos ni la misma pandilla, no íbamos a los mismos guateques, en fin, no éramos amigos.

Y es que Luis era especial. Tener Ela, y no darle importancia era un ejemplo. Nunca nadie le oyó quejarse. Parece como si quisiera decir a todo el mundo que Dios le había dado tantas cosas buenas, su familia sobre todo, que no tenía derecho a quejarse por algo tan sin importancia como una enfermedad degenerativa. Yo esto lo he contado en muchos sitios y a mucha gente, y todo el que lo escucha se queda admirado y sobrecogido.

A su mujer Elena sólo la he visto tres veces en la vida, la primera, al lado de Luis, encantadora y elegante, en el funeral de Cristina, mi mujer; las otras dos, de la mano cariñosa de Javier Gros, en el tanatorio y en el entierro de Luis. No recuerdo lo que le dije, sólo que era uno de los compañeros de Areneros. Me dio las gracias por lo que Luis disfrutaba con esas comidas, y me transmitió una paz y una serenidad, que me hizo salir de allí muy reconfortado. Elena, es probable que no te vuelva a ver, ya sabes, no tenemos los mismos amigos, no vamos a los mismos guateques… Pero por si alguna vez leyeras esto, quiero que sepas el gran bien que me trasmitiste, y que en vez de reconfortarte yo a ti, fuiste tú la que lo hiciste conmigo.

Y gracias a ti Luis, tú sí que has trasmitido cosas y todas buenas. Has sido un ejemplo para todos, de bondad, de simpatía, de categoría. Y gracias también a Areneros, que obró en mí el pequeño milagro, y ya puedo decir bien alto que Luis Ester sí que era AMIGO MÍO.

Nota

El texto anterior es la transcripción, con levísimos cambios, realizada por José Luis Mingo Zapatero de lo escrito por Luis Ester Butragueño en recuerdo de nuestro compañero Pablo Satrústeguí Silvela y publicado en el Blog de la Promoción el 13 de septiembre del año 2013

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G. Blein

Gracias Luis.

Todo mi respeto y toda mi admiración hacia la enorme categoría humana de Luís, “amigo de la infancia” de Areneros, arquitecto y “Conmilitón”. Ejemplo para mí, desde hace muchos años, en todas estas facetas; pero sobre todo como PERSONA, sí, con mayúsculas, negrita y subrayado.

Ya está, en presencia del Altísimo, fuera del tiempo, como nos dijo el sacerdote en la Misa el mismo día que Luís subió al Cielo. Desde allí vela por todos nosotros. Necesitamos, yo necesito, que nos enseñe a afrontar los problemas de cada día, a veces pequeños a veces enormes, sobre todo estos últimos, con la misma fe, la misma grandeza y la misma sencillez con que el los afrontaba.

Estoy seguro de que lo hará. Ya lo hizo aquí abajo con su familia.

Extraordinaria familia digna de él, lo habíamos comprobado hacía muy poco, a quienes -me hubiera gustado hacerlo personalmente- envío todo mi cariño y mi proximidad con un fuerte abrazo para todos y muy especial para Elena.

Gracias Luís.

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J. Gros

Nuestra vida con Luis Ester

Félix Ester, en un colegio en Madrid, presenta a su íntimo amigo Leopoldo Gros a su hermana Teté Ester. Surge la relación, y una boda que duró toda la vida.

Un vallisoletano, Manuel Casas, y un gallego, Fidel Isla, se conocen haciendo la mili en Galicia. Cuando cada uno se casa tiene miedo de que su mujer no se lleve bien con la del otro. Craso error. No solo hubo química entre sus esposas, sino que también la hubo en la siguiente generación. Elena Casas y Blanca Isla se quieren como hermanas, y cuando Blanca pierde a su madre, en plena adolescencia, busca consuelo y apoyo en Elena y su madre..

Luis y yo, de la misma edad, fuimos compañeros rigurosos del Colegio de Areneros desde los 5 hasta los 16 años, y pasamos juntos los veranos en Pozuelo de Alarcón. Allí, en la misma pandilla, desarrollamos nuestras destrezas en el futbol, bici, y “ligoteo”, entre otras habilidades. Prácticamente estábamos juntos todos los días del año. Pasamos más tiempo juntos que separados.

A partir de los 16 años, cada uno empieza su vida universitaria por vías distintas, pero con los veranos en común.

Años después, Blanca viene a la Universidad a Madrid y naturalmente en la cercanía de Elena y sus padres.

Elena Casas y Luis Ester empiezan a salir como pareja, y buscan un amigo para que saliera con Blanca. Ese resulté ser yo. Un gran afortunado.

Toda esta introducción es para resaltar el triple vínculo que yo tenía con Luis. Primo hermano, compañero de colegio, y juegos en verano, y marido de la amiga íntima de su mujer. A pesar de que Blanca y yo vivimos en Galicia y Elena y Luis en Madrid, viajamos juntos.; salimos juntos regularmente durante 50 años. En una de esas ocasiones, hace poco más de uno apareció la, aparentemente inofensiva palabra, de cruel significado, “ELA”. No es fácil describir lo que se siente al congelarse el corazón.

Con una entereza increíble, Luis y Elena empezaron una nueva etapa de su vida. ¡¡¡Estación de fin de trayecto a la vista!!!. Nuevo sistema de vida, con un apoyo increíble de sus hijos hermanos y amigos.

Se ha dicho ya mucho de la fortaleza y bondad de Luis, pero creo que nunca será bastante. Con una entereza envidiable siguió su particular calvario, con fe en Dios, y sin quejas ni exigencias.

La buena simiente puede perderse si cae en mal sitio, pero la mala, caiga donde caiga no puede dar buen fruto. La bondad de Luis ha dado un fruto extraordinario en todos, pero especialmente en sus más próximos.

De los hijos habría mucho que decir, pero aquí solo quiero afirmar que rozan la excelencia en todos los sentidos, fiel reflejo de sus progenitores, y que solo hay que oírles hablar de su padre, y ver cómo se les iluminan/humedecen los ojos, para ver la grandeza de su héroe.

Me centro ahora en sus amigos y más concretamente en SUS conmilitones de Areneros, porque a ellos les dedico este “In memoriam” de Luis.

En los últimos ¿ocho meses? (Gurri con su portentosa memoria lo podrá decir), ya le costaba ir a las comida en el club Mirasierra. Tenía que auxiliarse con una silla de ruedas. Gurri lo llevaba, y Luis era sumamente feliz con ello. Notaba vuestro cariño y disfrutaba de él. En los últimos meses ya decía que no podía ir, pero yo lo animé y acompañé hasta que su cuerpo dijo basta.

Luis disfrutaba con sus conmilitones y contaba en familia las maravillosas conversaciones con cada uno.

Ahora, que nos ha dejado un terrible agujero en el alma, hay que darle las “gracias” por su amistad y por su ejemplo.

Luis. Descansa en paz. Seguro que muchísimas personas te añoran, pero yo quiero añadir QUE TODA ESTA VIDA JUNTOS DURANTE 74 AÑOS ME HA SABIDO A POCO.

Un abrazo enorme.

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J.L. Mingo

Queridos compañeros, con dolor y alegría, os reenvío los WhatApp que he recibido de Elena en la tarde de hoy, 25 de mayo de 2019, mi respuesta a sus mensajes y lo que finamente ella me ha contestado.

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Querido José Luis, soy Elena, la mujer de Luis Ester. Después de haber leído conmovida la carta que le dedicaste a mi marido, te pido por favor que hagas llegar estas letras al grupo de "conmilitones" de Areneros.

Muchas gracias por tu cariño y un abrazo, Elena

He recibido con verdadera emoción la carta de José Luis Mingo sobre Luis y vuestro querido grupo de conmilitones de Areneros. No sabes cómo agradezco tus palabras.

Ya sabéis todos, la ilusión que le hacía a Luis asistir a estas comidas que procuraba no perderse bajo ningún concepto. Y a pesar de su traidora enfermedad siguió yendo gracias, sobre todo, al empeño de su querido amigo Gurri y a su primo Javier Gros que tan cariñosamente se ocuparon de él, y sólo dejó de acudir cuando verdaderamente se sintió incapaz de estar todo ese tiempo sin su mascarilla para respirar. Quiero que sepáis que ha pasado con vosotros unos momentos maravillosos y que por ello os estoy profundamente agradecida porque le hacía tan feliz veros a todos que la comida de los jueves de Areneros fue de las últimas cosas a las que renunció.

Muchas gracias a todos por vuestro cariño y por vuestra asistencia al funeral y al tanatorio. Estoy convencida que desde Cielo os estará viendo y seguirá disfrutando de vuestras comidas, vuestros chistes y vuestros comentarios y siempre estará de alguna manera con vosotros. Mis hijos y yo os mandamos un beso muy fuerte a todos. Elena.

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Elena, muchas gracias por tus palabras que inmediatamente haré llegar a nuestros compañeros. Y, aunque ya lo sabes, decirte que todos, absolutamente todos nosotros, con el corazón abierto, quedamos a tu disposición y a la de vuestra familia, os acompañamos en el dolor y, sobre todo, en la alegría de haber tenido a Luis en el centro de vuestras vidas. Muchos besos. José Luis

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José Luís.... Me haces llorar otra vez.... Un millón de gracias por tus palabras. ... Nunca os olvidaré….

Un beso muy fuerte....

………………………

3. ESQUELA DE LUIS